Hay personas que te dejan, no porque quieran, sino porque la vida los obliga. Hace mucho tiempo, en una conversación, escuché algo así como "sí pues, un día estás aquí, y al siguiente estás en Tailandia trabajando para una fábrica de fideos".
Es verdad, aveces el dinero hace eso, el dinero, el trabajo, los problemas, hasta la salud, o simplemente las necesidades. Pero, ¿tu prioridad no deben ser las personas que quieres? Quizás sí, pero siempre llega un momento en que te debes separar de ellas. Debemos aprender a respetar esas razones, no sé si entenderlas, pero al menos tratar de hacerlo y respetarlas.
Así como la vida da vueltas, las personas también.
No hay nada qué hacer, tenía que pasar. Ya sabía eso, pero no quería que fuera tan pronto. Es que... no puedo (o no quiero) aceptar que alguien, que quiero tanto, me tenga que dejar.
No quiero pero lo respeto, más no lo entiendo.
De todas formas, yo me pregunto:
¿Quién me dará mi abacho diario?
¿Quién me jalará la cola "sin que me de cuenta"?
¿Quién me sacará conejo en la espalda cuando estoy estrezada?
¿Quién me dirá "hoy correrás bastante para que te bañes"?
¿Quién nos calmará antes de cada partido?
¿Quién nos dirá "Si llegamos a 80 puntos les invito un pollo a la brasa"?
¿Quién me hará chucaca cuando me duela la cabeza?
¿Quién me mirará feo cuando esté hablando mucho?
¿Quién me invitará Kola Inglesa?
¿Quién me pasará cancioncitas por celular?
¿Quién me dirá "El árbol es mejor que Panda"?
¿Quién dejará que lo imite durante una hora?
¿Quién me aguantará tanto?
¿Quién me tratará de amarrar el pelo sin lograrlo?
¿Quién me pondrá en la pizarrita como "X"?
¿Quién dejará que me pare en sus pies para caminar?
¿Quién me dirá alumnix?
¿Quién hará de mi papá en Perú?
¿Y QUIÉN.. QUIÉN SERÁ MI PROFIX? :(
Nadie, venga quien venga...
la respuesta es NADIE.
(sólo una persona se ganó ese lugar tan especial)
lunes, septiembre 22
sábado, septiembre 20
Tengo problemas.
Sí, como todo el mundo, los tengo. No hablo de problemas como el dinero, notas, peleas (aun que de esos tampoco me faltan)... yo hablo de otros problemas.
Problemas mentales, de los que tiene todo el mundo. Esos problemas que te hacen raro. Esos que hacen que sientas miedo ante cosas ridículas, que sientas envidia, celos excesivos, afición por algo material, que te dan algo llamado personalidad, y que no sé, simplemente te hacen raro.
Todos tenemos esos problemas, creo...
Por lo menos todos somos raros...
Mis problemas me molestan, la verdad, me joden la vida. Así soy yo: con problemas.
Así que olvídalo, no voy a cambiar.
Soy jodida, estrezante, antipática, problemática, celosa, engreída, caprichosa, resentida, orgullosa, soy una persona de pocos amigos que ama el queso, el basket, la literatura, el cabello lacio, odia a las huecas, los bichos, una persona que se encariña rápido con la gente pero si le hacen daño (generalmente) se le hace muy fácil dejarla de lado (pero no es vengativa), una persona que se embriaga de sueño, que le gusta el helado con kola inglesa, dormir con dos almohadas (una para abrazarla), comer queso solito porque es muy rico, una persona a quien le encanta reír..
Soy así, y lo odio. Pero me gusta.
Quizás necesite un psicólogo, y creo que cada ser humano en esta vida lo necesita. El PROBLEMA es que yo no confiaria en ningún psicólogo... ¿Por qué hacerlo?
Concluyo: hay problemas que no tienen solución.
Eso me jode.
Problemas mentales, de los que tiene todo el mundo. Esos problemas que te hacen raro. Esos que hacen que sientas miedo ante cosas ridículas, que sientas envidia, celos excesivos, afición por algo material, que te dan algo llamado personalidad, y que no sé, simplemente te hacen raro.
Todos tenemos esos problemas, creo...
Por lo menos todos somos raros...
Mis problemas me molestan, la verdad, me joden la vida. Así soy yo: con problemas.
Así que olvídalo, no voy a cambiar.
Soy jodida, estrezante, antipática, problemática, celosa, engreída, caprichosa, resentida, orgullosa, soy una persona de pocos amigos que ama el queso, el basket, la literatura, el cabello lacio, odia a las huecas, los bichos, una persona que se encariña rápido con la gente pero si le hacen daño (generalmente) se le hace muy fácil dejarla de lado (pero no es vengativa), una persona que se embriaga de sueño, que le gusta el helado con kola inglesa, dormir con dos almohadas (una para abrazarla), comer queso solito porque es muy rico, una persona a quien le encanta reír..
Soy así, y lo odio. Pero me gusta.
Quizás necesite un psicólogo, y creo que cada ser humano en esta vida lo necesita. El PROBLEMA es que yo no confiaria en ningún psicólogo... ¿Por qué hacerlo?
Concluyo: hay problemas que no tienen solución.
Eso me jode.
domingo, septiembre 14
domingo, septiembre 7
Huecas: reinas, misses :)
Las huecas existen, es decir, las que son realmente huecas. Yo no sabía eso hasta el 5 de setiembre del 2008.Me explico, la gente (y me incluyo) piensa que una persona hueca es una fresa, superficial, que sólo va de shopping y nunca sale sin antes haberse puesto su lipstick. Claro, todas éstas características varían depende de qué hueca es, hay huecas que sólo usan rosado, hay otras que no. Y así hasta ellas buscan su lado "original" en su barbie world. (Y eso, las barbies son lindas).
A lo que voy es que es muy fácil indetificarlas, hasta en su forma de hablar con un tono rarísimo que pareciera que vinieran de otro país (uno muy tonto).
Estas personitas me dan mucha risa, debo decir que he llegado a querer a más de una persona de ese tipo, porque quizás me di cuenta que no son tan malas, que quizás no son tan aburridas cuando les tiras un lapo y les dices "me aburres con tanto chico y tanto maquillaje" y que quizás debo conocerlas antes de sólo decir "es hueca: no me cae". Sí he tenido una que otra amiga hueca, ninguna muy cercana (las respeto y todo pero no las aguanto por mucho tiempo)... Bueno sólo una... pero prefiero no decir nombres, sólo decir que la quería un montón :)
Bueno, siempre me he burlado de las huecas, en impro, me encanta salir actuando de hueca o ver a alguien actuar de hueca, son un personaje muy divertido. Y hasta el viernes yo pensaba eso, que eran sólo un personaje.
Debo decir que no estoy rodeada de gente hueca, mis amigas no lo son y mi familia tampoco. Creo que ésto hizo que llegue a pensar en algún momento que las huecas no eran más que un personaje ficticio (y divertido). Nunca pensé tener a una hueca cerca a mí, una DE VERDAD.
El viernes 5 fui a jugar basket (ADECORE) con el equipo de mi colegio a otro colegio que la gente lo considera repleto de huecas.Yo no era de éstas personas. Es decir, en cualquier colegio hay gente hueca, gente que se cree gótica, emo, punk o algo que implique negro, gente que colecciona estampillas, gente que guarda insectos en su cuarto, gente que en sexto de primaria ya es capaz de entrar a la universidad, gente rara, gente común, en fin GENTE.
Así que cuando dijeron que júgábamos ahí no se me vino ningún comentario a la mente ni nada por el estilo. Fuimos al colegio y cabe decir que es muy grande... demasiado para mi gusto (así es pituquillos, no me gusta su colegio), entramos al coliseo y había unas chicas que estaban vestidas de una manera muy huachafa (como para llamar la atención) sin embargo todo normal porque nadie fue a juzgar a nadie por su ropa, nosotras solo fuimos a jugar basket. Estas chicas se pusieron a hacerle barra a su colegio, y gritaban y cantaban. Hasta ahí todo bien.
En el último tiempo, además de estas chicas también estaban sus mamás y obviamente, el equipo de basket. Y empezaron a burlarse de nosotras cuando fallábamos una canasta. Lo cual me pareció muy estúpido ya que nosotras ibamos ganando por 30 puntos.
(EL PARTIDO ACABÓ 53 A 23 A FAVOR DE MI COLEGIO)
Es decir, ellas están mucho peor que nosotras, pero ni si quiera tienen la capacidad para darse cuenta de eso.
Acabó el partido, y nosotras nos fuimos hacia el bus que nos llevaría al colegio y las divas del colegio X empezaron a seguirnos, buscando a nuestra mejor jugadora,
seguro querían autográfos ;)
No diré todo lo que nos dijeron ni lo que les respondimos pero quiero dejar bien en claro, que nunca había estado tan cerca de huecas de verdad.
Las huecas son gente incapaz, que no tienen cerebro para darse cuenta de lo rídiculo que se ve burlarse de alguien sólo porque su pensión de colegio es más barata que la de ellas, son gente desubicada ya que en un campeonato de basket van a hacer competencia de quien trae la zapatilla más cara, se creen mejores sólo porque sus mamás son rubias falsas que sólo saben ir al gimnasio, a la peluquería y a las tiendas.
Gente que es tan pobre que piensa que el dinero le da derecho a ser una engreída y la hace la mejor en todo. Para cualquier hueca, en la NBA nadie entra por tener las mejores zapatillas, anda a un desfile de modas, quizás ese sea tu mundo.
Tengo que aclarar que a pesar de que las chicas que vi en ese colegio son las más huecas que he visto en mi vida, sigo sin generalizar ya que creo que algún porcentaje de sus alumnos deben ser normales.
No quiero ser atorrante, pero con el trato que nos dieron ese día me dí cuenta que la gente tiene razón al llamarlas huecas,
es decir nunca había visto tanta masa de gente hueca junta.
Yo me pregunto si así han tratado a los demás colegios que han ido a jugar con ustedes que también les han ganado, (ya que sé que han perdido todos sus partidos) y si así tratarán a los qe vayan en el futuro a ganarles (ya que son el peor colegio de esta serie de ADECORE).
Ustedes mismas se han ganado esa reputación de huecas, porque (al menos yo) no soy tan ignorante para creerlas estúpidas solo porque la mayoría son rubias o porque tienen dinero, pero sí las considero huecas por cómo actuaron ese día.
Ustedes solitas se crean esa fama ;)
A todo esto, concluyo...
Las huecas no son una chica fresa que sólo usa rosado y le encanta ser popular, una hueca va mucho más allá de eso, es un personaje real y de terror.
jueves, septiembre 4
Querer a alguien.
Estoy enamorada. Que dificil es esto, mirar al chico que te gusta y no poder decirle que lo amas. Sentir que el solo te quiere como amiga, y esconder lo que en verdad sientes por esa amistad, porque quizás la puedes perder. Si no puedes tenerlo como enamorado, al menos tenlo como amigo.
Yo no sé si él ha notado que me gusta, pero a veces siento que puede entrar en mis pensamientos y que se entera de todo lo que siento. Otras veces siento que simplemente no tiene la menor idea de que me gusta, y es justo cuando yo sola me delato con acciones o con miradas y expresiones. A veces me quedo callada y solo me detengo a mirarlo y disfruto cada momento que lo tengo cerca y cuando él me mira solo me limito a sonreir y siento como una chispita de ilusión corre desde mi corazón hasta todo límite de mi cuerpo. Me quedo callada y solo dejo que el silencio hable por mí, mintiendo discretamente haciendole creer que sólo lo quiero como amigo.
Cuando peleo con él es cuando tengo muchas más ganas de decirle que lo amo, de decirle que no quiero pelear más porque simplemente estoy enamorada de él. Pero como siempre, me empiezo a limitar y lo único que hago es echarme la culpa con tal que me dé un abrazo de reconciliación. Algunas veces nos decimos cosas que nos hieren mucho, y mientras más lo quiero, más dañan. A veces ya no aguanto y simplemente dejo que mi orgullo me gane y no me echo la culpa, pero igual sigo esperando la hora en la que volvamos a ser amigos, y poder decirle que lo quiero y que odio pelear.
Cuando lo veo con otra chica, solo debo retenerme y contener mis celos. No soy nadie para decirle que me molesta. Trato de no mirarlo pero hacia donde volteo están los dos juntos, y sin querer veo detalles como sus dos manos juntas. Cuando me cuenta cosas sobre chicas que le gustan, solo debo empezar a aconsejarle y guardar sus secretos más profundos en mi mente, para que poco a poco la carcoman y cuando acaben con ella empiecen con el corazón.
Pero lo lindo es cuando él está conmigo, cuando me agarra de la mano a mí y cuando siento que solo somos él y yo. Cuando caminamos juntos y yo ni sé a donde estamos llendo, sólo lo sigo y miro todo lo de al rededor notando lo bello que es el mundo a pesar de todo lo que hay en él. Llego a agradecerle a Dios que me permita estar ahí, junto a él, y empiezo a fijarme en lo lindo que es el mar, en lo inalcanzable y mágico que es el cielo, en lo puro que puede ser el aire, en la vida tan valiosa de las plantas, y en lo insignificantes que somos los humanos, pero que cuando estamos con alguien que amamos, podemos observar el mundo y llegamos a valer mucho, sólo por la persona que está a nuestro costado.
Todo se acaba, y en un momento debemos despedirnos. Me da miedo perderlo, me da miedo no volverlo a ver. Empiezo a caminar sola, recordando una y otra vez exactamente lo que pasamos juntos hace un rato, y me dan ganas de correr y pedirle que no me deje, de hablar con Dios y rogarle que me prometa que no me lo quite antes de tiempo. Me doy cuenta que el tiempo que pase con él jamás será suficiente, que simplemente siempre voy a necesitar más, que puedo llegar a extrañarlo en cinco minutos, que simplemente sin él todo se vuelve oscuro y nada es lo mismo.
Es inexplicable la sensación que siento cuando mi celular vibra por que recibí un mensaje de él, o cuando la ventana de messenger que me avisa que inició sesión aparece en mi pantalla. Es una alegría inimaginable que me hace responderle o hablarle lo más rápido posible. Cuando entro a messenger lo primero que hago es fijarme si él está conectado, y si no lo está miro de vez en cuando su nick pensando "conéctate por favor".
Pienso en él todo el tiempo, es imposible que no relacione nada con él. Al escuchar música cada canción tiene algo que ver con él, cada programa de televisión, es decir, todo.
Yo sé que el no siente nada por mí. Ojalá encuentre a alguien que lo ame y que lo haga feliz, lo apoyaré y supongo que al verlo feliz seré feliz. Quizás no tanto como cuando estoy con él, pero algo es algo. Quizás duela pero cuando él encuentre la felicidad, yo también lo haré.
Escrito el 6 de Febrero del 2008
FICCIÓN.
Yo no sé si él ha notado que me gusta, pero a veces siento que puede entrar en mis pensamientos y que se entera de todo lo que siento. Otras veces siento que simplemente no tiene la menor idea de que me gusta, y es justo cuando yo sola me delato con acciones o con miradas y expresiones. A veces me quedo callada y solo me detengo a mirarlo y disfruto cada momento que lo tengo cerca y cuando él me mira solo me limito a sonreir y siento como una chispita de ilusión corre desde mi corazón hasta todo límite de mi cuerpo. Me quedo callada y solo dejo que el silencio hable por mí, mintiendo discretamente haciendole creer que sólo lo quiero como amigo.
Cuando peleo con él es cuando tengo muchas más ganas de decirle que lo amo, de decirle que no quiero pelear más porque simplemente estoy enamorada de él. Pero como siempre, me empiezo a limitar y lo único que hago es echarme la culpa con tal que me dé un abrazo de reconciliación. Algunas veces nos decimos cosas que nos hieren mucho, y mientras más lo quiero, más dañan. A veces ya no aguanto y simplemente dejo que mi orgullo me gane y no me echo la culpa, pero igual sigo esperando la hora en la que volvamos a ser amigos, y poder decirle que lo quiero y que odio pelear.
Cuando lo veo con otra chica, solo debo retenerme y contener mis celos. No soy nadie para decirle que me molesta. Trato de no mirarlo pero hacia donde volteo están los dos juntos, y sin querer veo detalles como sus dos manos juntas. Cuando me cuenta cosas sobre chicas que le gustan, solo debo empezar a aconsejarle y guardar sus secretos más profundos en mi mente, para que poco a poco la carcoman y cuando acaben con ella empiecen con el corazón.
Pero lo lindo es cuando él está conmigo, cuando me agarra de la mano a mí y cuando siento que solo somos él y yo. Cuando caminamos juntos y yo ni sé a donde estamos llendo, sólo lo sigo y miro todo lo de al rededor notando lo bello que es el mundo a pesar de todo lo que hay en él. Llego a agradecerle a Dios que me permita estar ahí, junto a él, y empiezo a fijarme en lo lindo que es el mar, en lo inalcanzable y mágico que es el cielo, en lo puro que puede ser el aire, en la vida tan valiosa de las plantas, y en lo insignificantes que somos los humanos, pero que cuando estamos con alguien que amamos, podemos observar el mundo y llegamos a valer mucho, sólo por la persona que está a nuestro costado.
Todo se acaba, y en un momento debemos despedirnos. Me da miedo perderlo, me da miedo no volverlo a ver. Empiezo a caminar sola, recordando una y otra vez exactamente lo que pasamos juntos hace un rato, y me dan ganas de correr y pedirle que no me deje, de hablar con Dios y rogarle que me prometa que no me lo quite antes de tiempo. Me doy cuenta que el tiempo que pase con él jamás será suficiente, que simplemente siempre voy a necesitar más, que puedo llegar a extrañarlo en cinco minutos, que simplemente sin él todo se vuelve oscuro y nada es lo mismo.
Es inexplicable la sensación que siento cuando mi celular vibra por que recibí un mensaje de él, o cuando la ventana de messenger que me avisa que inició sesión aparece en mi pantalla. Es una alegría inimaginable que me hace responderle o hablarle lo más rápido posible. Cuando entro a messenger lo primero que hago es fijarme si él está conectado, y si no lo está miro de vez en cuando su nick pensando "conéctate por favor".
Pienso en él todo el tiempo, es imposible que no relacione nada con él. Al escuchar música cada canción tiene algo que ver con él, cada programa de televisión, es decir, todo.
Yo sé que el no siente nada por mí. Ojalá encuentre a alguien que lo ame y que lo haga feliz, lo apoyaré y supongo que al verlo feliz seré feliz. Quizás no tanto como cuando estoy con él, pero algo es algo. Quizás duela pero cuando él encuentre la felicidad, yo también lo haré.
Escrito el 6 de Febrero del 2008
FICCIÓN.
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